Amanezcamos en los ojos de los demás
Con sonido de violín, leve, pero con resonancias de alma, de despedida, de nostalgia, recorre todo el relato con que Rose6002, voz alma, bien narrada, llena de latidos cálidos que acarician nuestra alma para alcanzarnos, para auparnos... versiona el cuento de Hans Christian Andersen... Me gustaría por una vez que no perdierais de vista el vídeo, ese invierno, ese frío gélido, donde una pequeña -mirad la ternura con que están delineados cada uno de sus rasgos, cada una de sus emociones-, lejos del calor humano, intenta revivir mediante las cerillas con que se gana la vida, ese calor, esa necesidad del cariño humano y sobre todo y a pesar de que le cueste las cerillas que le quedan, la necesidad de una madre... No es una canción, lo sé, no es un poema, también, no es un relato mío, también, pero por medio de este relato quiero encender una cerilla por cada niño desnutrido del mundo, por cada niño que no tiene la oportunidad de nacer, por cada