Ojos de niño

      La vida se nos llena, se nos recorre de dolores, de heridas que nos devoran, que como monstruos se nos tragan nuestros sueños, se nos tragan nuestros corazones de niños, nuestros ojos de niño.... sí, cuán daño nos hacen, no, nos enseñan, no nos dan una ruta de viaje...       Esa es el alma de esta canción, Surrender, de Barlow Girl, ese es el latido, esa es la dulzura, esos son los labios que deben comunicarse con tu niño interior, con tu almita buen, esa es el abrazo tamaño oso que tu almita lleva esperando desde.... no te refugies, por favor deja de huir, deja de correr, estoy contigo, dice el Papá bueno, estoy contigo dice tu almita buena, con una luz que es llama, con una luz que es tu madre desde siempre... tu almita, déjate llevar, me ha estado buscando, me ha estado gritando desde antes de nacer, con esa necesidad y tenacidad... ¿ves? ¿sientes tus lágrimas? ¿sientes su torrente? ¿sientes cómo tus lagrimas me llaman, cómo tus lág...

               Con sonido de de violín, con el piano tanteando, arranca susurro, oración, plegaria la voz de Alyssa Barlow, sus manos se dirigen al Papá bueno, mientras sus ojos se hallan cerrados... El miedo, las dudas, el apego a las olas, uffff ... fffffff, no permiten, duelen, causan inseguridad, miedo....              Pronto voz de ángeles, plegaria puente en la naturaleza, y en el ser humano, se manifiesta la voz, la respuesta, el Papá bueno, no sabe de otra cosa,abraza con ansia, besa con ansia, levanta con ansia el ser humano postrado en el suelo.... El alma, aún no acaba, no termina de desnudarse de sus miedos, de sus sueños, de sus yoyoísmos, pero la palabra del Papá bueno vuelve una y otra vez, nos besa de nuevo con ansia en nuestros ojos de niño aún cerrados, y dulce musita de nuevo en nuestros oídos, ríndete, ríndete, ¿no te das cuent...

      Quiero dedicar esta entrada a todos aquellos que han perdido/que hemos perdido, a todos aquellos que han sufrido un accidente, a todos aquellos que ya no están, a todos los que han encendido estrellas en nuestros ojos; en particular quiero dedicársela a Arabia cuyos ojos llenos de estrellas de los ojos del amado, se le han llenado de lágrimas por un accidente donde su pareja ha quedado gravemente herida. En definitiva, quiero que este final feliz en la boca de las hermanas Barlow sea esa ascua o estrella que nunca decline en nuestros ojos.         Como un timbre, como un despertador, como un sol que entra por las persianas aún cerradas, el piano desteje estos acordes... nos arrulla, nos acaricia, nos sonríe....          Arranca la voz de las hermanas Barlow, convirtiéndose en increpación,  anudándose a los acordes del piano, en voz alta que se pregunta, que se deshace, que con lo...

            El sonido de una máquina de hospital, con su gañido de enfermedad, a la que se suma el chelo y el violín,  inicia esta composición de denuncia, de explotación, de una sociedad que enferma a las personas... El piano, entonces, cobra vida, parece despertarse de una pesadilla, cubierto de sudor y de pasado, para recibir la voz alma, susurro y cielo de las hermanas Barlow...            Desde esa pesadilla, llena de oscuridad, de miedo, de soledad, parece despertarse con voluntad, con esperanza, con desesperación, con fe... en cada una de sus palabras, en cada una de sus lágrimas... Cerramos los ojos y cuántos jóvenes perdidos (alcohol, anorexia,  bulimia, tabaco, drogas, pérdida del interés escolar...) se cuelan entre nuestros ojos, cerramos los ojos y cuántos de nosotros nos hemos perdido en alguna que otra adicción (alcohol, drogas, pornografía...)...  ...

          El sintetizador abre esta bella y honda composición interpretada por las hermanas Barlow, como oración, como testimonio a los que sufrieron la cruel e hijoputada (perdón) barbarie de los campos de concentración. Sobre uno de los muros se podía leer, I believe in the sun, even when it's not shining. I believe in love, even when I don't feel it and I believe in God, even when He is silent. ('Creo en el sol, incluso cuando no nos regala con su luz, creo en el amor, incluso cuando no lo siento, y creo, creo en Dios, incluso cuando permanece en silencio').             Me encanta la voz alma, la plegaria con que las hemanas Barlow completan la oración, porque me alcanza su dolor, su grito, su susurro en silencio, la voz de cada uno de los prisioneros de los campos de concentración... porque con la limpieza de un alma buena, con la confianza en ese papá bueno que nos entregó este marav...