Por favor, ¿me abrazas?

            El sonido de una máquina de hospital, con su gañido de enfermedad, a la que se suma el chelo y el violín,  inicia esta composición de denuncia, de explotación, de una sociedad que enferma a las personas... El piano, entonces, cobra vida, parece despertarse de una pesadilla, cubierto de sudor y de pasado, para recibir la voz alma, susurro y cielo de las hermanas Barlow...

           Desde esa pesadilla, llena de oscuridad, de miedo, de soledad, parece despertarse con voluntad, con esperanza, con desesperación, con fe... en cada una de sus palabras, en cada una de sus lágrimas... Cerramos los ojos y cuántos jóvenes perdidos (alcohol, anorexia,  bulimia, tabaco, drogas, pérdida del interés escolar...) se cuelan entre nuestros ojos, cerramos los ojos y cuántos de nosotros nos hemos perdido en alguna que otra adicción (alcohol, drogas, pornografía...)...

           Es curioso, escucho las voces alma y música plegaria que se elevan al papá bueno y abren ventanas, abren con esa fe que sólo dan las lágrimas tanto tiempo vertidas de quien ha perdido la fe y la esperanza los puentes con que el papá bueno y la madre naturaleza nos besaron golosos de pequeños, pronuncian palabras que dicen con amor nuestros nombres, deben ser nuestros nombres, no lo olvidéis, con que limpian muchas de las enseñanzas vertidas por esta sociedad (belleza superficial, urgencia, prisas, valor material y fugaz de las cosas, etc, etc.) y , con sus abrazos de papá bueno y mamá naturaleza nos laten, nos dan calor, nos dan luz en cada uno de los seres amados, en cada uno de los amigos, en cada uno de los compañeros, en cada uno de los que se cruzan a nuestro lado... 

           El grito alcanza la intensidad del canto, de la plegaria, de la queja en voz muuuuuu altaaa al papá bueno para que se compadezca de nosotros, que nos perdone, que nos permita como sociedad actuar como adultos, para que sepamos enseñar a unos jóvenes, nuestro futuro, para sean las estrellas, luz, camino, olas en movimiento, de sus hijos, y de los hijos de sus hijos. Quizás las palabras sean, aunque nos suenen a las de siempre, las mismas, confianza, apoyo, compañía, educación en unos valores plenos, llenos de respeto a los demás seres vivos y desarrollo de la convivencia como  realizador de la persona. El sintetizador nos besa dulcemente esta noche, porque aún nos queda a los adultos mucho camino por recorrer mañana cuando amanezca.

          Gracias a todos los que con vuestra vida, vuestra sonrisa, vuestra alma, vuestra ternura, vuestra fe en la vida, en el amor, hacéis que estas palabras tengan sentido... Buenas noches

'Hay tanta oscuridad en mí que impide que pueda ver con claridad
Me llena de pánico  lo que me pueda  suceder.
Pronuncio una plegaria, ayúdame a no huir más
por favor, ¿me abrazas?

Y cántame una canción llena de amor de nuevo
pronuncia  palabras que sanen mi corazón
cántame una canción con tu amor y entonces
deja que tus palabras me recuerden quién soy

Tú nunca me has faltado antes, ¿por qué, entonces, siento que me das la espalda?
Si te cerrara mi corazón la oscuridad me alcanzaría
Necesito con ansiaaaaaaa tu voz que me ayude a no caer muuuuuuu hondoooo
por favor, ¿me abrazas?

Y cántame una canción llena de amor de nuevo
pronuncia  palabras que sanen mi corazón
cántame una canción con tu amor y entonces
deja que tus palabras me recuerden quién soy

Porque tú eres todo lo que necesito
y todo lo que quiero es que te quedes conmigo
Eres todo lo que quiero
y todo lo que quiero es que te quedes conmigo


Y cántame una canción de nuevo
di las palabras que sanen mi corazón
cántame una canción con tu amor y entonces
deja que tus palabras me recuerden quién soy

(Traducción muuuuuuuuuuu libre de vuestro cansinoooooooooo oficial)