Olas en movimiento alcanzan nuestra orilla

 


          La voz de un niño, su diálogo con un amigo, comienza esta hermosa melodía de Era, Don't you forget about me... Ya el diálogo anuncia esas notas de calor que en ningún momento desaparecerán... Un amigo, su madre enferma y su hermanito pequeño enfermo y hambriento, pide a su amigo que le ayude, que le acompañe a la ciudad; le pregunta si estará siempre ahí para ayudarle, que a su lado siempre se siente bien....
     
  Pronto es la voz, pronto es la dulzura, es la melodía que como un salmo, que como un latido una y otra vez repetido resuena dentro, se nos hace mar, se nos hace humedad, se nos hace abrazo, se nos hace mirada que nos desnuda de nuestros miedos... Nos late, nos arropa, nos deja en la orilla la humedad de las olas que han venido a la orilla para descansar finalmente... Es el paso del tiempo, es la voz de la ausencia, pero acompañado del calor, del hogar, del amor cueste lo que cueste... 
           Su murmullo, su voz, su nana, su alma nos aúpa, nos arropa, nos anochece una vez más, acompañándonos la voz, el almita de los niños que una y otra vez acompañará la composición, y con él la voz de nuestra almita buena, y con él las lágrimas que nos han acompañado en las ausencias de nuestros seres queridos, madre, amada, amigos, padre.... pero sus estrellas, su calor, su latido sigue en nuestra alma, como esas voces de niños nos persiguen, nos arropan, sí, las lágrimas están ahí, por supuesto, la ausencia de sus sonrisas, también, la ausencia de sus brazos también, la ausencia de su ternura también, la ausencia de su calor también... pero cada caricia, cada ternura, cada sonrisa, cada mirada nos acompaña, nos late, nos amanece y anoche a un tiempo...
 
  El acompañamiento es el sintetizador de forma básica, acompañado en ocasiones, de los acordes del organillo, pero su latido nos mece, nos conduce a la orilla donde ellos, su calor, su almita, sus almitas buenas, nos llenan de nuevo  de calor, de hogar, de estrella, buenas noches

´Mama está enferma, dice que no se halla con fuerzas para levantarse.

Mi hermanito se encuentra enfermo y está hambriento.

Debo ir al pueblo en busca de algo de comida.

¿¿te vienes conmigo?

-Claro, Corney,cuenta conmigo.

-Siempre me siento bien cuando estás conmigo.

-Eres mi amigo, Corney.

-¿Estarás ahí cuando sea mayor? ¿Lo harás?

-Con todo mi corazón.


NO me olvides

No te olvides de mí

Fuimos seguros y jóvenes

en un mundo de inocencia.


NO me olvides

No te olvides de todos nuestros sueños

Desde que te has marchado lejos

sólo tu ausencia me acompaña.

(Traducción muuuuuuuuu libreeeeeeee de vuestro cansinoooooooooo oficial)

Comentarios

Entradas populares de este blog

balandros en un mar de latidos...

No te rindas, Mario Benedetti