El sonido de una máquina de hospital, con su gañido de enfermedad, a la que se suma el chelo y el violín, inicia esta composición de denuncia, de explotación, de una sociedad que enferma a las personas... El piano, entonces, cobra vida, parece despertarse de una pesadilla, cubierto de sudor y de pasado, para recibir la voz alma, susurro y cielo de las hermanas Barlow... Desde esa pesadilla, llena de oscuridad, de miedo, de soledad, parece despertarse con voluntad, con esperanza, con desesperación, con fe... en cada una de sus palabras, en cada una de sus lágrimas... Cerramos los ojos y cuántos jóvenes perdidos (alcohol, anorexia, bulimia, tabaco, drogas, pérdida del interés escolar...) se cuelan entre nuestros ojos, cerramos los ojos y cuántos de nosotros nos hemos perdido en alguna que otra adicción (alcohol, drogas, pornografía...)... Es curioso, escucho las voces alma y música plegaria que se elevan al papá bueno y abren ventanas, abren con esa fe que sólo …
Ternura es ...
ResponderEliminarsentir la sonrisa en la mirada,
acariciar la vida en un instante,
oxigenarse de positivismo,
alimentarse de paz,
abrazarse a la paz...
Ternura son tus entradas, porque están llenas de paz.
Besos.
*Gracias, Carla, estoy pensando en que te quedas tú a cargo del blog.... Chiquilla, qué alma, me encanta cómo transmites tus experiencias de las cosas y la sensiblidad con que expresas tus sentimientos y te dejas mecer y llevar por estas olas. Besosssssss
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