Para esta noche, unas cuantas reflexiones, que deberían ser el amanecer y el anochecer de nuestras vidas. Guardar silencio por un momento y dejaros abrazar y acariciar por la voz en off y por los mensajes, en la letra íntima y llena de experiencia de Pablo Neruda y con los resabios del alma que busca, que vive, que comparte, que disfruta, que ama... Por favor, queda prohibido no hacer todo esto.

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